La artritis es la inflamación de las articulaciones,
pero generalmente se relaciona a las decenas de enfermedades reumáticas y condiciones relacionadas que ocasionan
dolor, rigidez e hinchazón en las articulaciones y los tejidos conectivos.
Mucha gente tiene la creencia errónea que la artritis afecta solo a las personas mayores,
pero lo cierto es que también los adolescentes e incluso niños pueden ser víctimas
de la enfermedad.
La artritis es muy dañina debido a que puede deteriorar
los sistemas de soporte de las articulaciones, asi como los músculos, los tendones,
los ligamentos y también otras partes del cuerpo.
Independientemente de la utilización de medicinas como parte del tratamiento para la artritis, un programa de ejercicios diseñado a la medida puede muy útil para
manejar el dolor, así como para conservar la estructura de las articulaciones y
su funcionamiento adecuado.
Una vez conociendo que tipo de artritis padeces y
entiendas qué síntomas puedes tener, tú y tu médico o fisioterapeuta pueden establecer
un programa equilibrado de actividad física para disminuir los efectos nocivos de la artritis y mantener una buena
salud en general.
Los dolores
relacionados con la artritis pueden reducir drásticamente el rango de
movimiento de las articulaciones. Además al evitar la actividad física debido
al dolor por la artritis, se puede llegar a disminuir el tamaño del músculo y a
la excesiva subida de peso.
El ejercicio, es beneficioso si tienes artritis debido
a que ayuda a la movilidad de las articulaciones, a la fuerza de los músculos y
a la condición física en general así como ayudar a mantener un peso óptimo.
Un programa para combatir
la artritis debe incluir tres tipos de ejercicios, tales como: los ejercicios
con rangos de movimientos, los ejercicios de fortalecimiento y los ejercicios
de endurecimiento. Como resultado de practicarlos se ayuda a tener un peso
estable y deseado además de fortalecer los músculos y articulaciones.
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